Prueba superada

Apretada victoria de los Villarroyenses en el último partido de liga regular ante Warriors, los locales ya matemáticamente campeones del grupo 1 desde hace ya varias jornadas tenían la oportunidad de despedir esta primera fase del campeonato quedando invictos en casa ante su afición y con un rival de la parte alta de la clasificación.

Como era de esperar el partido sería de lo más igualado ya que ambos equipos contaban con importantes bajas y así lo demostró el primer cuarto, que tras los diez primeros minutos reflejaba un 7-8 en el marcador, un tanteo algo bajo debido a que ambos equipos no consiguieron anotar hasta pasados los primeros cuatro minutos de juego.

En el segundo cuarto los de Villarroya se imponían en el luminoso por 16-11, cinco puntos de ventaja que a la postre serían decisivos para el tanteo final y que tras una primera parte en la que los locales podrían haberse impuesto con más autoridad  en ataque lo  que reflejaba un partido abierto con un resultado al descanso de 23 a 19.

Ya en la segunda mitad la igualdad anotadora en ambos equipos seguía siendo protagonista, mientras que los locales convertían en acciones positivas los contraataques los visitantes se mantenían vivos gracias al acierto en el tiro, lo que nos daba otro cuarto sin que ninguno de los dos equipos pudiera distanciarse y se firmaban tablas en el parcial con un empate a 14 puntos y con el luminoso reflejando un 37 a 33.

Para el último y decisivo cuarto ambos conjuntos salían a la cancha con posibilidades de victoria, durante los primeros minutos los locales conseguían abrir algo la brecha y se distanciaban en siete puntos, pero mientas que a los villarroyenses el tiempo jugaba a su favor a los visitantes les sucedía lo contrario, debían jugar rápido y sin alargar los ataques lo que propiciaba algún error  en forma de pérdida y que aprovechaban los locales para pasar a atacar sin prisa pero sin pausa en un cuarto donde de nuevo ambos equipos firmaban tablas 17-17 pero que servían para inclinar la balanza a favor de los villarroyenses que se imponían por 54 a 50 en parte gracias a los cuatro puntos de renta obtenidos en la primera mitad.

La próxima cita será ya en los play-off  contra el octavo clasificado del grupo 2, que presumíblemente será Independiente, equipo contra el que nunca nos hemos enfrentado y del que sabemos de su juego duro bajo los aros .

Derrota intrascendente

El duelo en lo alto de la clasificación del grupo I de esta segunda vuelta de liga se jugaba en el polideportivo José Garcés de la capital maña, sede habitual de Cafetería Babuino segundo clasificado y rival muy a tener en cuenta ya que es uno de los mejores equipos de esta liga por lo que se esperaba una competida lucha por la victoria a pesar de ser un partido intrascendente para ambos conjuntos ya que matemáticamente ambos están clasificados para los play-off con los villarroyenses en primer lugar y en este caso los rojillos como segundos clasificados.

Una vez comenzado el partido los locales defendían hombre a hombre, defensa que realizarían durante todo el choque y que a pesar del empeño local no serviría para distanciarse en el marcador de forma contundente y el primer cuarto arrojaba un resultado final de 18-11 pero con la sensación de que ambos equipos podían ganar el choque.

En el segundo cuarto se imponían los villarroyenses por dos puntos de margen 13-15 de parcial reduciendo la ventaja de los locales  gracias en parte  al acierto en los triples y  que se iban al descanso con una ventaja de cinco puntos 31 a 26 y todo por decidir.

Ya en la segunda mitad la igualdad en el marcador siguió siendo la tónica dominante y ofrecía otro cuarto en el que ninguno de los dos equipos conseguía distanciarse claramente en el marcador y con un parcial de 15-12 y con ocho puntos de margen 46 a 38 se llegaba al último cuarto en el que nada más comenzar los locales ampliaban su ventaja llegando a los 12 puntos, máxima renta y que exigía la pronta reacción azulona si se quería ganar un partido que en ese momento parecía más una final que un partido sin consecuencias, lo que hacía que los locales cometieran varios errores consecutivos con pérdidas de balón que permitían aprovechar a los villarroyenses y reducían terreno poniéndose a sólo tres puntos 57 a 54 en la parte final del partido en el que los de Villarroya conseguían meter un triple sobre la bocina desde el centro del campo que fue considerado fuera tiempo lo que de no ser así hubiera supuesto el empate y consiguiente prórroga.

Por los pelos

Otra ajustada victoria de los Villarroyenses en esta parte final de la liga regular, en esta ocasión ante un José-Nemry correoso y aplicado que supo jugar de tú a tú sacando el máximo partido de sus virtudes en un choque muy igualado en el que el primer cuarto arrojó un resultado de 16-10 con  dominio local pero poca frescura en el juego.

En el segundo cuarto con 17-13 de parcial se volvían a imponer con cierta facilidad los azulones, dominando el juego interior en los primeros minutos pero con  algo de recuperación en los minutos finales por parte visitante, antes de que ambos equipos se fueran al descanso con un resultado de 33 a 23.

En la segunda mitad el tercer cuarto fue el protagonista de dar máxima emoción al choque ya que los locales encajaban un parcial de 8-19 en el que la defensa no acababa de ser efectiva y contrastaba con el mejor ataque visitante de todo el partido, lo que ponía las cosas muy igualadas para la parte final de un choque en el que la balanza acababa declinándose al lado villarroyense, gracias al mejor acierto anotador en los últimos segundos unido a una defensa más intensa que permitía un parcial de 22-17 y 63 a 59 como resultado final, pero con la sensación de no haber hecho bién los deberes sobre todo en facetas defensivas, lo que unido al elevado porcentaje de acierto visitante  pudieron perfectamente haber supuesto la primera derrota de los de Villarroya en lo que va de temporada.