Como no podía ser de otra manera la afición Villarroyense
acudió en masa a ver a su equipo en el partido más importante jugado hasta la
fecha por los azulones y que en el caso
de ganar por más de doce puntos daba directamente el pase a la Final Four a disputarse
en el pabellón de Villarroya lo que daba una motivación extra a tal
trascendental encuentro.
Con algunas destacadas bajas por parte local daba comienzo el
partido siendo ya desde los primeros minutos muy igualado con los dos equipos
muy disciplinados en tareas defensivas pero algo más acertados en ataque los
integrantes de Clínicos Asociados que
ganaban el primer cuarto por 8 a 13.
En los siguientes diez minutos del segundo cuarto la igualdad
en el marcador fue una constante, con tablas en el parcial 10 a 10 y con un
ambiente en las gradas que recordaba más un partido de euroliga jugado en
Grecia que unos cuartos de final desarrollándose en Villarroya.
Tras el descanso y con el marcador reflejando un 18 – 23 daba
comienzo la segunda parte, periodo en el que los villarroyenses conseguían
ponerse por delante en el marcador con un parcial de 15 a 8 y que podría haber
sido mayor de no encajar un triple sobre la bocina al final de un tercer cuarto
que con el luminoso reflejando un 33 – 31 presagiaba un último periodo más que
reñido y con los villarroyenses todavía vivos en la eliminatoria.
En el cuarto decisivo ambos equipos se marcaban perfectamente
no dejando al rival jugar con comodidad lo que daba un parcial de 7 a 6 con los
azulones algo precipitados en los contraataques pero muy efectivos en defensa,
llegando al final con un marcador de 40 – 37 con victoria para los de
Villarroya pero insuficiente para contrarrestar la renta desfavorable del
partido de ida jugado ante un rival que de no suceder nada extraño es claro
candidato a ganar la final.