Traspies

Como presagiábamos el partido de cuartos de final de play-off ante Clínicos Asociados no iba a ser fácil y los peores presagios se hicieron realidad en el  polideportivo César Augusto de la capital maña, donde los Villarroyenses no supieron encontrar el camino para hacerse con una victoria que habría dejado las cosas más claras para el partido de vuelta en Villarroya.

Ya en los primeros minutos del choque pudo verse a los locales muy efectivos desde la línea de 6,25 con tres triples nada más empezar replicados con otros tantos por parte visitante lo que daba igualdad en casi todo el cuarto salvo en los últimos compases del mismo donde Clínicos se distanciaba cinco puntos arriba  con 18-13 en el marcador.

En el segundo cuarto más de lo mismo, tablas en el parcial con empate a 12, pero conseguidos de distinta manera y con el juego interior dominado por los Villarroyenses y con el árbitro como protagonista invitado cuyas decisiones sacaban de quicio en más de una ocasión a los jugadores de Villarroya.

Con el luminoso reflejando un abierto 30-25 daba comienzo la segunda mitad, a la poca fluidez atacante de los Villarroya en este periodo  hubo que sumar la elevada puntería local, para que Clínicos pudiera firmar un cuarto con neta superioridad anotadora en todo el partido, 19-11 de parcial en un cuarto en el que un poco más de acierto en los tiros libres de los jugadores de Villarroya hubiera sido suficiente para que los locales no tuvieran esa renta de ocho puntos más al final del cuarto.

Para el último cuarto los de Villarroya pasaban a defender de zona a individual, con la idea de secar el poderío anotador de los mejores jugadores visitantes, lo que dio sus frutos pero sólo a medias y los de Villarroya se adjudicaban el cuarto 10 a 11 en el parcial pero doce puntos abajo en el total del partido que acababa con un resultado de 59-47, resultado complicado para la vuelta pero no imposible teniendo en cuenta que Villarroya lleva esta temporada 12 partidos seguidos sin perder en casa.