Oportunidad perdida

De nuevo nos veíamos las caras con Defensores, esta vez en su terreno y con superioridad  numérica  de nueve jugadores los de Villarroya por sólo cinco los locales, hándicap que no les afectó durante el primer cuarto, que con una diferencia de 13 puntos  a favor a falta del último minuto se recortó con dos triples seguidos para acabar el primer cuarto con 16 a 7 en el marcador. Ya en el segundo cuarto se redujo aún más la ventaja debido al cansancio local y que se llevaron los foráneos por 12 a 15 de parcial y 28 a 22 en el marcador. En la reanudación se pudo ver otro cuarto igualado en puntos esta vez 9 a 10 de parcial y 37 a 32 de resultado global y que dejaban el partido abierto de cara al último cuarto, donde además los locales perdían un jugador por la acumulación de cinco faltas. Periodo que ganarían otra vez los visitantes por 14 a 15, pero insuficientes para salvar el partido que acababa con un resultado de 51 a 47, con unos últimos 15 segundos de juego muy apretados en los que la  diferencia era sólo de un punto y donde el árbitro quizás por su falta de experiencia tuvo más protagonismo de la cuenta comiéndose una falta clara bajo el aro local que podría haber cambiado el curso del partido,  no quitando con esto mérito a la victoria de Defensores que supieron jugar sus bazas y consiguieron un elevado porcentaje en la línea de tiros libres con 16 aciertos de 24 intentos permitiéndoles no perder el liderato en el marcador en ningún momento.

2ª vuelta y buen comienzo

Acabada la primera vuelta en el octavo lugar de la clasificación, para el primer partido de la siguiente ronda recibíamos la visita de un mermado C.B. Valdefierro, al que ya habíamos derrotado en el partido de ida pero que viendo la clasificación seguro que al final de la fase regular será un rival directo para optar a posiciones de cuartos, lo que hacía necesaria la victoria con el añadido de jugar en casa ante nuestra afición.

Nada más empezar el choque se vio que los locales habían salido al campo con la lección aprendida de partidos anteriores y con un juego muy efectivo en ataque y en defensa, unido al poco acierto de los visitantes se finalizaba el primer cuarto con un 14 a 1 para los de Villarroya, dando paso a un segundo cuarto más igualado que se llevaron  también los locales por 7 a 6 y 21 a 7 de resultado global, pero con el rival muy cansado por no tener recambio y con algunos jugadores muy cargados de faltas. En la reanudación nada más empezar el tercer cuarto el equipo visitante perdió un jugador por cometer su quinta falta lo que puso todavía más cuesta arriba el partido para los de Zaragoza, que a pesar de todo siguieron peleando y mostrándose caballerosos en todo momento, terminando el tercer cuarto 8 a 3 de parcial y 29 a 10 en el luminoso, ventaja que fue cuestión de administrar durante el último periodo para arrojar un resultado final de 43 a 21, destacando la faceta defensiva del equipo local y el juego de un equipo cada vez más conjuntado, así como la deportividad de los chicos de Valdefierro por  hacer el esfuerzo de venir a jugar  a pesar de estar  tan mermados de efectivos.

Fin de la mala racha

El último partido de la primera vuelta se había convertido en un partido importantísimo, nos enfrentábamos a Mep-Basket décimo clasificado con sólo un punto menos en la tabla 15, por 16 de los de Villarroya y que tras seis derrotas consecutivas hacían imprescindible la victoria.

El partido empezaba igualado y con pocos puntos al final del primer cuarto 5 a 7 para los de Zaragoza, que también se llevaron el segundo con un parcial de 10 a 14 y con un marcador adverso para los locales de 15 a 21 tras los dos primeros cuartos. Ya en la segunda mitad los locales empezaron el tercer cuarto de forma arrolladora con tres canastas seguidas en el primer minuto de juego, con tablas en el marcador y muy crecidos, se empezó a fraguar la victoria que con un parcial de 17 a 6 ponían a los locales al frente del marcador, cinco puntos arriba con un tanteo de 32 a 27 y con el último y decisivo cuarto por delante, que de nuevo se adjudicaron los locales 9 - 5 de parcial y 41 a 32 de resultado al final del partido, cabe destacar la actitud de todo el equipo, que jugó en bloque durante todo el partido y también la actitud del rival, muy correctos en todo momento, no dando el partido por perdido en ningún caso pese a venir sólo con cinco jugadores.

Madrugón sin premio

A pesar de lo madrugador del horario del partido, domingo a las 9.15 de la mañana, el equipo se presentaba en San Agustín con diez jugadores de campo, otro lesionado que hizo las veces de entrenador y hasta algunos incondicionales miembros de nuestra afición, es decir todo un lujo para tratarse de una temprana mañana de domingo. Con estricta puntualidad y con muy poco tiempo para calentar empezaba el partido, en el primer cuarto ya empezaba a tomar ventaja el equipo  local que con bastante acierto anotador se ponían once puntos arriba 19-8 tras el primer cuarto, dando paso al siguiente con más igualdad anotadora 13-11 también para los locales y que dejaban el marcador al descanso de 32 a 19 favorable para los jugadores de casa, pero con tiempo todavía para la reacción del equipo visitante. En el tercer cuarto de nuevo el acierto anotador desde más allá de la línea de 6,25 para los locales y algunas pérdidas de balón del equipo visitante le dieron de nuevo el cuarto a Clasic 20-14 de parcial y con 52-33 en el luminoso a falta del definitivo y último cuarto, periodo que por fin fue para los de Villarroya 9-19 que reducían la ventaja en diez puntos gracias a rápidos y bien jugados contraataques, pero que no fueron suficientes para derrotar a un muy inspirado Clásic que se hacían con la victoria por 61 a 52